Los pensamientos son como nubes. Hay días que no te dejan ver nada con lucidez, pero hay días que si te separas del ruido del pequeño yo, puedes VER la luz más pura y liberadora que hay, entonces te das cuenta que Incluso el día más nublado, si te reconoces a ti mismo como Ser,  puede ser tan tan saludable, fascinante y brillante, como el que más.